- Comisaría de Gijón.
Un joven de 22 años, David Fernando B. G., falleció ayer en la comisaría de la Policía Nacional debido a causas que se presumen naturales, según explicaron fuentes policiales. El joven, que ya había estado detenido anteriormente en varias ocasiones por delitos contra el patrimonio, había sido presentado en la comisaría a las 6.45 horas por agentes de la Policía Local como presunto autor de un robo con fuerza, al haber sido sorprendido en el interior de un establecimiento del barrio de El Natahoyo al que supuestamente había accedido mediante la fractura de los cristales de la puerta del mismo.
Antes de su traslado a la comisaría había sido llevado a un centro sanitario, una práctica habitual antes del ingreso de un detenido en los calabozos, para comprobar su estado de salud. Durante su estancia en las dependencias policiales no solicitó ninguna asistencia médica ni manifestó encontrarse en mal estado. Sin embargo, a las 14.20 horas no respondió a los funcionarios que le realizaban una nueva visita. Los agentes, al observar una situación anómala, dieron aviso a los servicios médicos de la comisaría y al SAMU, al tiempo que ponían en práctica las maniobras de reanimación. Los responsables médicos que acudieron a la llamada no pudieron hacer nada por salvar la vida de David Fernando B. G.
Tras acordar el levantamiento del cadáver por parte de la médico forense de la comisión judicial, el cuerpo de David Fernando B. G. fue trasladado al tanatorio para proceder a la autopsia, que determinará las circunstancias del fallecimiento.
OTROS DETENIDOS Por otra parte, la Policía Local detuvo el día de Navidad, a las 22.50 horas, a dos jóvenes gijoneses, A. G. D., de 23 años, y J. D. M., de 28, por el robo de un camión. En su huida, por el centro de la ciudad, el camión arroyó a cuatro vehículos y causó desperfectos en el rótulo de un establecimiento hostelero. Todo comenzó cuando los agentes fueron alertados por un testigo de que un camión había causado daños a varios turismos estacionados en las calles La Merced y Martínez Marina. Lo localizaron en la calle Instituto e iniciaron la persecución del mismo utilizando las señales de emergencia a las que el conductor hizo caso omiso mientras manejaba el vehículo de modo temerario, sin respetar ninguno de los semáforos que se encontró por las calles Munuza, Plaza del Carmen y Felipe Menéndez.
Sin embargo, a la altura de la calle Marqués de San Esteban el camión se vio obligado a detenerse porque varios vehículos se encontraban detenidos esperando a que abriese el semáforo. El conductor del vehículo pesado, J. D. M, dio una tasa de 0.82 miligramos por litro en las pruebas de alcoholemia y tenía el permiso de conducir retirado por sentencia judicial hasta el 2 de julio del 2010. Ese mismo día, por la tarde, también fue detenido J. E. Z. C., de 37 años, acusado de un delito de violencia de género.
Asimismo, la Policía Nacional detuvo a un gijonés de 46 años por amenazar con una navaja a los porteros de un local de copas al negarle éstos la entrada al establecimiento por su estado de embriaguez. Los agentes también detuvieron a una madre y a sus tres hijos por entrar de forma indebida a la vivienda de sus inquilinos en Ceares e intentar echarles del domicilio bajo amenazas e insultos tirando en el rellano todos sus enseres. Otra detención fue la de una gijonesa por intentar robar productos de cosmética y perfumería de primeras marcas, valorados en casi 600 euros.
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