El ´orfanato´ del siglo XXI

Una nueva imagen para el orfanato minero. Las obras ya han transformado los terrenos que, desde 1931, acogieron a los huérfanos de la minería y que hoy se prepara para convertirse en un gran complejo residencial para mayores y jóvenes, de la mano de la Consejería de Bienestar Social y de la Fundación Orfanato Minero de Asturias (Fundoma).

La primera modificación visible ya es comprobable con una nueva calle que da acceso a la zona de El Naranco. Pero, además tal como explicó el gerente del Fundoma, Dimas Suárez, en lo que hasta ahora se conocía como el chalet --que fue residencia del director del centro-- las obras de rehabilitación han finalizado y se prevé que en las próximas semanas lleguen los primeros menores de primera acogida, con edades comprendidas entre 13 y 18 años. La casa tiene una capacidad para diez personas.

El conocido edificio Arco Iris, en la parte más cercana a la carretera de Villamejil, que en su día acogió a los dormitorios vio pasar la piqueta. Sobre el solar ya se levanta otra edificación, la que acogerá a la residencia de discapacitados y centro de día y que se espera que esté acabada para final del verano. La residencia geriátrica tendrá 72 plazas y la inversión asciende a los 2,5 millones de euros.

Entre las obras menos vistosas pero con gran trascendencia para el complejo está la central de biomasa, "cuyos trabajos también han empezado y que estará ubicada en las naves que en su día fueron cuadras", tal como explicó Dimas Suárez. Este nuevo sistema de energía no contaminante a través de biomasa será la que surta a los nuevos edificios, tendrá una instalación centralizada donde se quemará como combustible residuos de origen biológico como deshechos de aceites, cáscaras de frutos secos o material procedente de la limpieza de los montes. Esta institución será la primera en Asturias que se acoge a este moderno sistema energético.

Poco a poco, la reconversión de las instalaciones del Fundoma --más de 69.000 metros cuadrados-- van tomando forma. Todo este complejo de servicios sociales se sumará a la residencia universitaria, un albergue juvenil y un centro de formación ocupacional. Dimás Suárez, director de la fundación, apuntó que las inversiones superan los 11,5 millones de euros. Algo más de siete millones son financiados con medios propios y el resto con cargo a los fondos mineros. Bienestar Social, en virtud del acuerdo de colaboración, se compromete al mantenimiento de los servicios. Suárez añadió que la inversión directa en los cuatro nuevos edificios de servicios sociales superará los ocho millones de euros.