El menor acogido en el Centro Materno Infantil cuya detención para su posterior expulsión de España como si fuera mayor de edad fuera denunciada por SOS Racismo, fue puesto ayer a disposición del juez el cual ordenó su ingreso en un centro de internamiento de Valencia. SOS Racismo informó ayer de los hechos a través de una nota en la que se da cuenta de que, a pesar de haber sido presentada por su abogada toda la documentación sobre su minoría de edad, se ordenó su internamiento en un centro especial, paso previo a la repatriación. Según este colectivo, en este caso no ha prevalecido el interés del menor como marca la ley.
Según SOS Racismo, el Gobierno de Asturias a través de la Consejería de Bienestar Social empieza a aplicar en la comunidad autónoma "la mano dura contra la inmigración ilegal que prometió el PSOE en su programa electoral y empieza por los más débiles y desprotegidos: los menores alojados en sus centros".
SOS Racismo afirmó que además de este menor que se traslada a un centro de internamiento en Valencia, y cuya trayectoria seguirán, ayer también fue ordenado el ingreso en uno de estos centros para extranjeros irregulares "otro supuesto menor" que se encontraba alojado en el centro para menores del Fundoma. La titularidad de este establecimiento corresponde a la Consejería de Bienestar Social.
"Nuestra asociación seguirá denunciando ante las instituciones todos los casos que conozcamos sobre vulneración de derechos de los menores no acompañados que se encuentren en Asturias", afirman desde SOS Racismo. Para esta asociación humanitaria la lucha y la defensa de los derechos humanos de las personas, al margen de su nacionalidad y situación administrativa, "están por encima de todo".
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